Esto tiene particular relevancia en muchas calles de nuestros barrios, en las que no es que no garantice ningún distanciamiento social, sino que no permite siquiera pasar dos personas al mismo tiempo.
Entre las demandas que se plantean por parte de ambas entidades, se encuentra la ampliación de aceras y la ocupación temporal de calzadas, la creación de nuevas áreas de prioridad peatonal y la declaración de Madrid como Ciudad 30.