Desde el pasado mes de junio, vecinas y vecinos del barrio de Tres Olivos, comenzaron a movilizarse para evitar la construcción de un aparcamiento disuasorio en el barrio, dentro de un programa del Ayuntamiento de Madrid que preveía igualmente construir otro en Aravaca y un tercero en Hortaleza.
El problema de estas infraestructuras es que, en lugar de disuadir del uso del vehículo privado, lo mantiene y aumenta, con lo que la contaminación de las zonas en las que se ubican suelen estar en porcentajes altos.
A principios de julio, diversas asociaciones vecinales, la FRAVM y otras entidades, se dirigieron al Parlamento Europeo para pedir su intervención en la paralización de los proyectos.
A lo largo del mes de julio, las vecinas y vecinos de Tres Olivos, junto a la Coordinadora Vecinal del distrito, realizaron también diferentes movilizaciones, consiguiendo entre todas ellas que en el pleno del Ayuntamiento del 21 de junio, el equipo de Gobierno retirase el proyecto en las tres zonas previstas.
Como siempre decimos, el trabajo colectivo, la coordinación de actuaciones, la diversidad de formatos… y, desde luego, los objetivos de mejora para las personas y el medio ambiente, siempre ayuda a que se consigan los cambios.